Resulta bastante llamativo que en tan solo un mes Facebook haya sufrido una caída masiva de servidores dos veces, y por tanto también Instagram y WhatsApp. Ah, ¿que no sabías que Facebook era también dueño de las otras dos?
Algo raro está sucediendo cuando un grande como Facebook tiene estos problemas y en tan corto plazo de tiempo, y como os comentaba, no sólo afectan a su red social principal sino también al resto de sus servicios. En la caída anterior de marzo, a través de un mensaje en Twitter (tiene gracia la cosa), Facebook hizo saber los motivos de su caída:
Yesterday, as a result of a server configuration change, many people had trouble accessing our apps and services. We've now resolved the issues and our systems are recovering. We’re very sorry for the inconvenience and appreciate everyone’s patience.
— Meta (@Meta) March 14, 2019
Esto no sólo significa que no puedas entrar a Facebook mientras esperas en la consulta del médico y te aburres, sino que estrategias de marcas estén siendo afectadas porque en estos momentos tuvieran que publicar algo manualmente o algún tipo de contenido estuviera pagado. El estreno de un vídeo, el reveal de un nuevo producto, el inicio de una retransmisión en directo desde un evento… Entendemos que haya fallos, pero, ¿tan seguidos?
Twitter, Telegram, Line… están brindando con esta caída.
Por contra, problemas como este benefician a la competencia. Ahora mismo todos estamos en Twitter buscando información sobre el tema, hablando sobre él, haciendo memes, etc… Telegram o Line estarán recibiendo un pico de usuarios considerable que no puede esperar a que se solucione el problema de su mensajería principal de uso diario, WhatsApp. En estos momentos es cuando te das cuenta de lo dependientes que somos del teléfono móvil y de estar conectado continuamente, cuando no podemos superar la caída de servicios durante unas horas: los SMS siguen operativos y también las llamadas de teléfono 🙂 Aunque sé que no en todas las situaciones una solución, como si te encuentras en otro país con una tarjeta SIM recién comprada que sólo permite datos y no llamadas.
El imperio de Mark Zuckerberg no está en su mejor momento, ni por imagen de cara a la venta de datos de usuarios, ni por la propagación de fakenews, ni por el éxodo de usuarios jóvenes de la plataforma, ni por la frustración de marcas que ven que el crecimiento es imposible salvo que hagas un pay-to-win de inversión continua en la red social, y como ahora vemos, tampoco por su estabilidad.
Telegram for the win!
Voy a volver a Telegram, porque sé que además se le puede sacar mucho partido a los grupos. Vamos a ver qué novedades hay por Telegram desde que no la utilizo 🙂